Kevin Johansen

UN INCOMPRENDIDO QUE PROMETE

Ayer se presentó Kevin Johansen junto a su banda The Nada en el Teatro La Cova de San Isidro. Un show excelente donde las sonrisas, las anécdotas, la buena música y un público eufórico fueron los protagonistas de la noche.



Pasadas las diez de la noche, con un público ansioso, Kevin Johansen y su banda subieron al escenario y con el tema “En mi cabeza” dieron comienzo a un show dinámico y divertido. Ya desde su primera canción que sus fans no dejaron de aplaudirlo y bailar junto a él.

La interacción del músico con el público y sus anécdotas que contaban la historia de cada canción, generó una energía única tanto para los que estaban arriba del escenario como para el público que estaba fanatizado.

Aunque en la página de Johansen (http://www.kevinjohansen.com/) se diga que la idea de estos shows, que dará en el Gran Buenos Aires, son, entre otras cosas, para seguir “conquistando a su público”…ese objetivo ya está cumplidísimo.

Kevin nació en Alaska, y a los 12 años llegó a la Argentina, donde se crio. Quizás por ser hijo de padre norteamericano (su madre es argentina) es que canta varios de sus temas en inglés de una manera increíble, no sólo por el manejo del idioma sino por la excelente interpretación.
Aunque Liniers no puedo ir, estuvo presente allí, porque en la pantalla que se encontraba detrás de los músicos, los dibujos de este excelente dibujante bailaban al ritmo de la música.

El público eligió algunas canciones que quería escuchar, y una de ellas fue “La cumbiera intelectual”, momento en que la gente se puso de pie y no paro de bailar y cantar al ritmo de esta cumbia.

Una de las anécdotas que contó Kevin fue sobre la canción “No voy a ser yo”: dijo haberla escrito de muy chico pero que la letra le quedaba como un “hombre resentido” entonces fue su amigo Jorge Drexler el que la arregló, y fue otro de los temas más cantados. Aunque en el escenario habían sólo seis músico, si se cerraba los ojos parecían miles, porque la cantidad de instrumentos que sonaban era impresionante: un sonido y unas voces que fueron merecidas de esos interminables aplausos.

The Nada es el grupo que fundó este músico en Nueva York donde grabó su primer disco que lleva el mismo nombre que la banda. Dos años más tarde, en 2002, sale “Sur o no Sur” en Argentina y lo prepara para su despegue en 2003 cuando su “Don ´t with my baby” musicalizó la tira “Resistire”, lo que lo acercó a un público masivo. Ayer Kevin hizo referencia a este momento y dijo que él se enteró por un llamado de su hermana que una canción suya estaba sonando en la televisión. Ese mismo año lleno dos veces el Teatro Gran Rex (el más grande de Buenos Aires). Allí comenzó su gira por el exterior y actuó en la ceremonia de los premios MTV. City Zen es su tercer álbum (2005) que ayer también estuvo presente con “La falla de San Andrés”, “Desde que te perdí”, “Oops”, entre otras. Su último disco presentado en 2007 es LOGO que ocupó la mayor parte del show.
La cumbia, la milonga, las baladas, boleros y esa voz grave privilegiada deleitan en cada uno de sus proyectos musicales.

En las dos horas del show Kevin Johansen no sólo cantó y tocó, sino que también monologueó y actuó, sobre todo en la canción “El Incomprendido”, y generó una excelente identificación con su público en cada tema.
Para terminar dio un poco de “Guacamole” para todos, el primer tema de su primer “The Nada” presentado en el año 2000.

Un show pequeño pero excelente que viajó por cada uno de sus cuatro discos. Kevin Johansen: un incomprendido que promete.

Redacción: Ceci Castillo Fotos: Paula Bambill (para ver más fotos con la nota entrar a www.primeraplanamundial.com / Esprectáculos/ Música)